El orégano es una planta pequeña que se usa principalmente como condimento. Las hojas provienen de un arbusto de unos 40 centímetros, y tienen forma ovalada con bordes enteros. Generalmente se las dejan secar para tener mejor aroma y sabor. Se comenta que la planta, es nativa de las zonas mediterráneas, aunque actualmente se la puede conseguir en cualquier parte del mundo.
Al dejar secar sus hojas, se puede usarse como té, el cual posee varios beneficios para nuestro cuerpo, por ejemplo, es uno de los mejores estimulares para el estómago, los médicos lo recetan cuando se sufre pérdida del apetito, o problemas de digestión y flato.
Los neurópatas, lo recomiendan para los problemas crónicos de los bronquios y también para el asma. Se ha comprobado científicamente que es carminativo, antiséptico, sudorífico, y antiespasmódico, debido a eso ayuda a nuestro cuerpo a quitar toxinas que se ingieren a diario.
Este té es una gran fuerte de nutrición, y se lo recomienda a las personas padecieron de anemia o desnutrición. Gracias al alto contenido de vitamina K, mantiene nuestros huesos con mucha salud, y posee además grandes cantidades de fibra y propiedades anti-bacterianas.
Otros estudios que se han realizado, confirmaron que este producto puede usarse para combatir ciertas infecciones bacterianas.
Además, el té de orégano, sirve para enfermedades externas, para aliviar dolores reumáticos, articulares, distintas molestias posturales, y también se pueden hacer preparaciones con hojas secas, para combatir los problemas de la celulitis, debido a eso ayuda a mejorar la circulación de nuestra sangre, cuando se lo aplica externamente en el cuerpo.
Para finalizar, exclusivamente para las mujeres, gracias a que es un increíble emenagogo, facilita la menstruación, ayuda a disminuir los cólicos, retención de líquidos, dolor de estómago, dolor de cabeza y estados de tristeza e irritabilidad.