La albahaca es una planta aromática muy usada en la comida internacional. Es originaria de la India e Irán, donde han sido los primeros lugares que comenzaron a utilizar la hierba, para curación de distintas enfermedades digestivas y también para condimentar. Su introducción en la medicina es de hace miles de años atrás, y todas sus propiedades y beneficios son apreciados hoy en día.
Es una hierba que se puede cultivar para uso doméstico, aparte su propagación es fácil, y crece y se cosecha en cualquier tipo de clima. Principalmente, es usada en las comidas de origen mediterráneo, se la puede guardar muchos días en la heladera y siempre mantiene su frescura.
Posee muchas propiedades para combatir distintas enfermedades del sistema digestivo, gracias a que posee una sustancia la cual inhibe los efectos de las distintas enzimas que hay en nuestro organismo, que provocan inflamación estomacal. Cuando se consume albahaca en infusión, se ayuda a aliviar los gases intestinales, flatulencias, dolores de estómago y las indigestiones.
Las hojas, se usan para aliviar los síntomas causados por la fiebre y aquellos resfriados comunes, como son la tos, dolor de garganta, calculo renal, trastornos respiratorios, y enfermedades infantiles, trastornos de la piel y dolores de cabeza.
Posee un componente sumamente importante, el cual se usa como elemento principal de los medicamentos para la gripe y tos, el cual ayuda a mover las flemas que se provocan por la bronquitis y el asma.
Ciertos estudios realizados, comprobaron que posee propiedades para combatir el cáncer, gracias a sus componentes antioxidantes, flavonoides y betacarotenos, encargados de proteger las células de los radicales libres.